Los ladrones de tiempo.

No hace mucho hablaba con una amiga. Habían cerrado la empresa donde trabajaba (algo bastante habitual en estos tiempos que nos han tocado vivir) y se lamentaba que mientras estuvo trabajando no tuvo tiempo para tener hijos y ahora no tenía ni hijos ni el trabajo por el que habia sacrificado a esos inexistentes niños y ahora aunque tuviera tiempo para tenerlos no tenía dinero para mantenerlos.

Un tanto irónico.

Cuando tienes niños le entregas todo tu tiempo, el que tienes y el que no y la mayoría de veces, tan solo es aquel, que te dejan las obligaciones. Automáticamente todo tu tiempo pasa a ser para ellos. Y el tiempo para tí pasa a ser una utopía.

Una vez leí un dedicatoría en un libro. Decía así: "A mis pequeños ladrones de tiempo". Refiriendose a sus peques. La dedicatoria en sí me pareció bonita pero yo le dí otra interpretación: " He logrado acabar el libro a pesar de teneros, hijos mios". Es cierto, te roban cada minuto.

Tengo una amiga que una vez me dijo algo así aunque de una forma menos poética. Llamó a sus hijos: "sus pequeños chupópteros". Me decía que si no ponías ciertos límites absorvían todo tu tiempo. Siempre se ha dicho que los niños son esponja absorven todo lo que ven y todo lo que escuchan, pero tambien te absorven a tí, tu tiempo y tus energias.

Lo quieren todo de tí, aunque a medida que pasa el tiempo cada vez van queriendo menos y luego añoras cuando eras imprescindible o eso dicen ... yo aún no he llegado a ese punto.

Siendo mi peque grande un bebé me encontré con una mujer que se lamentaba de no haberle dedicado mas tiempo a sus hijos en detrimento de las obligaciones diarias.

- A provecha ahora- me dijo- que el tiempo pas muy rápido y luego te lamentas de los momentos no vividos. Hay cosas que pueden esperar... aunque ahora no te lo parezca.

Decía estopa que "el tiempo y el olvido son como hermanos gemelos". Pues menudo el tiempo te distorsiona los recuerdos, por ejemplo, llevo mas tiempo no siendo madre que siendolo pero si no lo pienso detenidamente se me olvida. 

Porque el tiempo todo lo atenúa. Olvidamos los malos momentos y a recordamos los buenos.

Algo así debe pasarnos a los padres, en general, porque sino, no me explico que cuando hablas con otros padres la mayoría solo te hablan de lo fántastico que es ser padre y lo mucho que su vida a mejorado desde que tienen hijos y te cuentan preciosas anecdotas que hacen que te plantees tener niños y conciente o inconcientemente obvian todas las noches sin dormir, las rabietas y ese llanto que puede usarse como método de tortura.

Al principio pensaba que lo hacían queriendo, para que otra incauta se atreviera a quedarse embarazada y cuando eso sucedía se reunían en su club secreto, riéndose, pensando lo que les esperaba a esos futuros padres, es decir, lo mismo que ellos habían pasado ya pero se lo habían callado. Ahora pienso que sí se les olvida.

Además tengo la teoría que es un arma de la madre naturaleza para así asegurarse nuestra supervivencia.

Lo mismo pasa con los dolores del parto, dudo que si no se olvidaran repitiéramos.

Aunque últimamente pienso que quizás otra razón. Los niños compensan mucho, es decir un beso de un niño puede hacer que se te olvide esas mil noches sin dormir. Un "te quiero mama" puede hacer que se esfume la angustia de todas esas rabietas y un abrazo puede hacer que sus llantos se atenúen.

También es verdad que llega un momento en el que parecen que te dejan de compensar y todo parece ir mal... pero eso momentos acaban pasando... de verdad. Acabareis viendo la luz al final del túnel.

Hasta aqui mi reflexion de hoy. Nos vemos pronto.